Las
Actuaciones Educativas de Éxito (INCLUD-ED Consortium, 2015) son actuaciones que ya han tenido este impacto social, porque han demostrado conseguir mejorar los niveles educativos y reducir las desigualdades allí donde se han implementado, y esa mejora ha sido constatada a través de la investigación. En este sentido, estas actuaciones son diferentes de las “buenas prácticas”. Las buenas prácticas, a pesar de su potencial para alcanzar excelentes resultados, están limitadas a contextos concretos. Las actuaciones educativas de éxito son efectivas independientemente del contexto donde se implementan y, por tanto, son transferibles a otras escuelas y comunidades para mejorar en todas ellas el éxito escolar y la cohesión social.